Una de las características de la película Sierra de Teruel es la simultaneidad de tres espacios y argumentos que se entreveran para culminar en un cuarto de síntesis final. Así, Teruel, con sus voluntarios que pretenden salir de la ciudad para ayudar a la asediada Linás, esta población nos presenta a su comité angustiado por los heridos que no cesan de llegar y la escasez de armas para su defensa, ante el que se presenta José, un campesino que quiere cruzar las líneas para informar a la aviación republicana, y finalmente la escuadrilla (que ya vimos en las tres primeras secuencias) que le acoge y acude en ayuda de Linás, bombardeando el aeródromo fascista indicado por José y un puente por el que deberían pasar los asaltantes. Toda estas estas historias, que suceden en un breve plazo ficticio de dos días, convergen en la narración de la batalla aérea, del derribo de uno de los aviones republicanos y la impresionante secuencia final en la que los habitantes de los alrededores acuden en socorro de los accidentados.
Por ello, podemos concluir que el eje de la historia es la villa de Linás (nombre ficticio). Es una muestra más de la precariedad y escasez de tiempo del rodaje el hecho de que precisamente sean las que más faltan, las secuencias relativas a ella, en especial las que hubieran narrado la resistencia contra los asaltantes franquistas (secuencias (XV-XIX, analizadas brevemente en VISORHISTORIA).
En esta web hemos analizado las circunstancias del rodaje de Linás en diversos artículos, empezando por su ubicación en: LINÁS O LA TRANSFIGURACIÓN DE LA HISTORIA, publicada en febrero de 2023.
En dicha entrada, partiendo de la conversación entre los jefes de la escuadrilla, se concluía que la ubicación de Linás se inspiraba en la población turolense de Sarrión, de un millar de habitantes. Pero persiste la duda de por qué no se usó dicho nombre sustituyéndolo por uno ficticio como Linás. Y más cuando algunos de los otros mencionados sí son reales, incluso el nombre del militar republicano que acudía en su auxilio: Jiménez, tal como cuentan las crónicas de la primera batalla de Sarrión (junio 1938) en la que estaba al mando de la Unidad Táctica Especial del Ejército de Levante, que se enfrentaba al rebelde teniente general Enrique Varela[i].
La fechas, sin embargo, inducen a dudar, ya que a estas alturas el guion de Sierra de Teruel ya estaba pergeñado. Y la segunda batalla de Sarrión en septiembre, sucedió ya en pleno rodaje (mientras se hallan en Tarragona rodando las escenas de la salida de los republicanos de Teruel). Las noticias que se iban recibiendo en el equipo de rodaje, quizá serían un estímulo.
Por otro lado, pudiera ser que, aún inspirándose en Sarrión (por la cercanía a los hechos reales del avión Potez de la escuadrilla estrellado en Valdelinares en diciembre de 1936), tomara como referencia hechos ocurridos pocas semanas antes (vividos u oídos), entre los que se inscribirían la valentía del campesino de Olmedo (que merece una entrada específica), o algunos combates de la zona del Tajo, incluidos en la novela La esperanza[ii], y llevados a cabo bajo las órdenes del personaje de Jiménez.
Tanto en las secuencias que reflejan el interior del Ayuntamiento de Linás, como en las posteriores, donde el comandante Peña, acompañado de Attignies, va a los pueblos cercanos a buscar coches que iluminen el despegue nocturno, aparecen los comités o consejos de pueblo. Aunque no es el objetivo de esta web, es pertinente dar una breve pincelada de las colectividades de corte anarquista que se crearon en muchos de los ámbitos rurales, en especial en Aragón. Así, parece ser que las cooperativas creadas en Sarrión y otros pueblos aledaños se agruparon alrededor de la de Mora de Rubielos[iii], a partir de una iniciativa impulsada por los anarquistas en el congreso de Caspe del 29 de agosto de 1936[iv]. En concreto, en el congreso extraordinario del 14 y 15 de febrero de 1937, celebrado también en Caspe, Mora de Rubielos agrupaba ya 21 colectividades, que contaban con 3782 miembros[v].
Lo que vemos en la película (secuencias XII y XIII) es que quién coordina las operaciones es un “presidente” del Comité Popular de Linás. Por su parte, en las secuencias de búsqueda de coches, el guion nos indica que Peña habla con los “delegados” de cada uno de los pueblos visitados (secuencias XXI y XXII). En ambos casos, no se aprecia en el filme una verdadera organización asamblearia como fueron durante el primer año de guerra[vi], sino más bien una dirección decidida por parte de los líderes mencionados, rodeados, eso sí, de gente solidaria, lo que implicó el reclutamiento de extras para el rodaje, en los pueblos aledaños de Barcelona, como El Prat de Llobregat.
Una curiosidad. Los interiores que correspondían al Comité de Linás, fueron rodados en el edificio del ayuntamiento del Pueblo Español de Barcelona, con una estética similar a la que tiene el ayuntamiento de la población de Sarrión.
Sirva esta entrada para poner en contexto el análisis de las secuencias XII, XIII y XIV, que se centrarán en dos aspectos: El rodaje en sí, realizado en su mayor parte en Barcelona (Estudios Orphea y Pueblo Español) y con algunos fragmentos en Villefranche-de-Rouergue, ya en 1939, al no haberse podido rodar en la ciudad catalana de Cervera; y por otra parte, la hazaña de José el campesino, así como los artistas que interpretaron los papeles del propio José o de González, el líder de los dinamiteros que llegan a Linás para apoyar su resistencia.
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[i] https://losraritosdelcamino.es/sarrion-batalla-de-sarrion-una-mirada-al-pasado/
[ii] MALRAUX, André. (1995) La esperanza. Madrid: Cátedra.
[iii] LEVAL, Gastón (1977). Colectividades agrarias en España. Madrid, Ed. Aguilera. Página 95
[iv] https://www.cgtaragonlarioja.org/fedens/wp-content/uploads/sites/2/2020/04/MATERIALES_Modulo_4.pdf
[v] https://asambleadigital.es/2020/09/09/las-colectivizaciones-durante-la-guerra-civil-parte-6-las-colectividades-agricolas-en-aragon/
[vi] OVEJERO, Anastasio. Las colectividades agrarias en España (1936-1938): un caso de autogestión obrera único en la historia. Athenea Digital – 17(2): 201-235 (julio 2017). Página 208 y siguientes.